viernes, 22 de junio de 2007

MAX WEBER: PENSAR LA RELIGION

- -
- -
El destino de una época cultural que ha comido del árbol de la ciencia es el de tener que saber que no podemos deducir el sentido de los acontecimientos mundiales del resultado de su estudio, por muy completo que éste sea. Por el contrario, debemos ser capaces de crearlo por nosotros mismos. También tiene que saber que los ideales nunca pueden ser el producto de un saber empírico progresivo. Y, por lo tanto, que los ideales supremos que más nos conmueven sólo se manifiesta en todo tiempo gracias a la lucha con otros ideales, los cuales son tan sagrados como los nuestros.


(Max Weber).

LA NATURALEZA DEL JUICIO


-
--



"Me parece que en ética,


al igual que en todas


las demás ramas filosóficas,


las dificultades y desacuerdos,


de los que su historia está llena,


se deben principalmente


a una causa muy simple,


a saber: al intento de responder


a preguntas sin descubrir primero


cuál es la pregunta


que se quiere responder."



--


George E. Moore



"Principia ethica"

--

Capitulo II

--

La naturaleza, en efecto, fija límites a lo que es posible, controla los medios que tenemos a nuestra disposición para obtener lo que es bueno. Y la ética práctica ha de tener en cuenta, ciertamente, este hecho. Pero cuando se supone que se prefiere lo que es necesario, lo que es necesario significa sólo aquello que hace falta para alcanzar un fin determinado, presupuesto como el bien mayor, y la naturaleza no puede determinar cuál es el bien mayor.¿Por qué hemos de suponer que lo que es simplemente necesario para la vida es ipso facto mejor que lo que es necesario para el estudio de la metafísica, por muy inútil que pueda parecer este estudio? (ibid. 90-92).


----



Capitulo III
--

Una conclusión correcta siempre se puede obtener por medio de un razonamiento falaz, y la vida buena y las máximas virtuosas de un hedonista [o de un filósofo moral en general] no demuestran de ninguna manera que su filosofía ética sea también buena. A mi sólo me interesa esta filosofía ética. Lo que discuto aquí es la eminencia del razonamiento [del filósofo moral], no la eminencia del carácter del hedonista [o del filósofo moral] como persona ni siquiera su eminencia como maestro de moral ( ibid.113).