domingo, 7 de octubre de 2007

ROQUE DALTON: Revisionismo

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Cuando un poeta llega a dar su vida en las luchas políticas, la inmediata posteridad suele explicablemente dramatizar el holocausto, poniendo el acento en la zona más grave y riesgosa de su compromiso, y a veces (pero no siempre) en el nivel más profundo de su indagación artística. En España fue el caso de Miguel Hernández y García Lorca; en América Latina, el de Otto René Castillo, Ibero Gutiérrez, Javier Heraud, Ricardo Morales, Leonel Rugama, Francisco Urondo y también Roque Dalton. Sin embargo, ese justo rescate de una actitud coherente y valerosa, corre el riesgo, sobre todo en este último caso, de opacar otro rasgo primordial, por cierto no tan frecuente en la poesía latino-americana: el ejercicio del humor.En el caso de Roque Dalton, más que hablar de humor en poesía, habría que hablar de humor poético. En poetas como Huerta o Nazoa es dable detectar el humor casi en estado de pureza, y debe reconocerse que esa limpidez consolida su eficacia y ayuda grandemente a que el lector asimile o adivine el contexto poético que rodea aquel chispazo. Roque en cambio elabora poéticamente el humor; lo convierte en poesía antes de soltarlo sobre la página.Desde su primer libro, La ventana en el rostro, habla de "los pobres locos que hasta la risa confundimos / y a quienes la alegría se de lágrimas". Y allí también admite: "Está uno y su cara. Uno y su cara / de santón farsante". Este poeta, que en el trato personal era un fabuloso narrador de chistes (los coleccionaba, casi como un filatélico), nunca llevó a su poesía la broma en bruto, sino la metáfora humorística, que por cierto no siempre era sencilla o fácilmente asimilable, ya que por lo común estaba rodeada de resonancias culturales. Cuando menciona, por ejemplo, que "las hojas se secaron entre las obras de Kipling" o en el brevísimo "Después de la bomba atómica", cuando se pregunta: "Polvo serán, mas ¿polvo enamorado?", el humor se da en un ámbito de cultura, sin el cual perdería su efecto.

--------- Prólogo de Mario Benedetti
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Macao
-------Opio

No Siempre.
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Porque,
por ejemplo,
en Macao
el opio
es el opio del pueblo.
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Roque Dalton ------ (El Salvador, 1935-1975), poeta y prosista, participó desde muy joven en la vida política de su país. Encarcelado varias veces, fue condenado a muerte en 1960. La sentencia no llegó a cumplirse por la caida del dictador de turno, cuatro días antes de la fecha fijada para la ejecución. Vivió exiliado en Guatemala, México, Cuba y Checoslovaquia. Enrolado en el ejercito Revolucionario del Pueblo (ERP), regresó clandestinamente a su patria donde fue asesinado por un bando ultraizquierdista de esa misma organización.
Extractado del libro "La ventana en el rostro. Biblioteca Roque Dalton." de la editorial Baile del Sol.
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ROQUE DALTON

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Amo tu desnudez

porque desnuda me bebes con los poros

como hace el agua cuando entre sus paredes me sumerjo.

Tu desnudez derriba con su calor los límites,

me abre todas las puertas para que te adivine,

me toma de la mano como un niño perdido

que en ti dejara quietas su edad y sus preguntas.

Tu piel dulce y salobre que respiro y que sorbo

pasa a ser mi universo, el credo que me nutre,

la aromática lámpara que alzo estando ciego

cuando junto a las sombras los deseos me ladran.

Cuando te me desnudas con los ojos cerrados

cabes en una copa vecina de mi lengua,

cabes entre mis manos como el pan necesario,

cabes bajo mi cuerpo más cabal que su sombra.

El día en que te mueras te enterraré desnuda

para que limpio sea tu reparto en la tierra,

para poder besarte la piel en los caminos,

trenzarte en cada río los cabellos dispersos.

El día en que te mueras te enterraré desnuda

como cuando naciste de nuevo entre mis piernas.


Roque Dalton


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TRES + UNO: ANTI-HAIKUS urbanos

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El calabobos
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Un tren gris de madera
les alejaba


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El sirimiri
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La noche traga piedras
desesperadas
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Blanca llovizna
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La ventana refleja
pinos sin aves

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Con el orbayu
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Las hojas más brillantes
huelen a mujer
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Víktor Gómez