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David González, de quien dice Antonio Gamoneda "... en la creación a partir del lenguaje están implicados un estado pasional y una intensificación de la conciencia y de la vida inalcanzables en cualquier otra creatividad o medio. No descuides David esta afortunada facultad que va contigo. Un abrazo, Antonio Gamoneda" según podemos escuchar y leer (carta manuscrita) en el blog del kebran, junto a Adolfo González y Andrés Ramón El Kebran, en Illescas, febrero 2008.
En Illescas, el 23 de febrero, en el Tributo a David González que coordinara el Poeta Andrés Ramón "El Kebran" y al que asistimos una hecatombe de agradecidos admiradores, lectores y poetas complices de David, pudimos escuchar voces ya singulares y reconocibles como la de Ana Pérez Cañamares o jovenes talentos como Adolfo Dominguez. Tanto El Kebran como Ana Pérez o el increible pero cierto escritor zaragozano Dioni (cuentista, poeta, narrador...) han dejado en sus blogs huellas impecables del buen hacer de ADOLFO GONZALEZ, de Cuenca, veinteañero con mucho presente por delante, para nuestra ventura...
Lo mejor de la poesía que nos transita desde la voz inapelable y fresca de Adolfo González es su capacidad de identificarse inmediatamente con el lector, removerle del sillón, empatizar y a la vez desequilibrar. Y exigir. La poesía de Adolfo genera una doble exigencia: la relectura y la revisión personal que tenemos sobre el presente, el mundo, el yo (y los otros). Sin retórica, sugerente, directo o envolvente, sabe llegar a dónde la huella quema y la palabra atrapa los sentidos, la espectativa, el ardor.
Os dejo 3 poemas que recitó en Illescas, y alguno de regalo.
Viktor Gómez
RÁNKING DE OPRIMIDOS
El oprimido número
uno se muere de hambre
delgado,escuálido.
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El dos
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El dos
muérese entre tanto disgusto
gordo que le va adelgazando
despacio, muy despacio.
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Y es el número tres
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Y es el número tres
otro oprimido, rebosando
monedas de grasa su estómago
por el ombligo.
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Es él.
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Es él.
Otro oprimido.
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Y tiene
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Y tiene
-no tiene otro remedio-
tiene que ir aflojandoel cinto.
SIEMPRE EN EL NAUFRAGIO
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Alguien repite: "el hombre es un lobo
para el hombre". Recordamos: de niños,
cuando había alguna pelea, muchos
usaban el recurso del mordisco.
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Sin embargo otros dábamos brazadas
con la mano abierta, por un instinto,
por un honor...Dura supervivencia.
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Y así parece, como dar brazadas,
este nadar por mares de miseria.
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Alguien repite: "el hombre es un lobo
para el hombre". Recordamos: de niños,
cuando había alguna pelea, muchos
usaban el recurso del mordisco.
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Sin embargo otros dábamos brazadas
con la mano abierta, por un instinto,
por un honor...Dura supervivencia.
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Y así parece, como dar brazadas,
este nadar por mares de miseria.
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POR HUMILDAD
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Los humildes escuchan. Están hartos
de tanto cuento triste, pero escuchan.
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La humildad es la oreja más hermosa,
la menos limpia, la menos encerada.
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Pequeña gran oreja
que tantas veces
se agacha (nos dispone)
para escuchar algo decente.
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¿Cuándo dejaremos de oír,
pequeña gran oreja,
la ruidosa injusticia que nos cansa
pero que no nos vence?
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Los humildes escuchan. Están hartos
de tanto cuento triste, pero escuchan.
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La humildad es la oreja más hermosa,
la menos limpia, la menos encerada.
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Pequeña gran oreja
que tantas veces
se agacha (nos dispone)
para escuchar algo decente.
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¿Cuándo dejaremos de oír,
pequeña gran oreja,
la ruidosa injusticia que nos cansa
pero que no nos vence?
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Adolfo González
TRIBUTO DEL RESUCITADO
(A David González, poeta compañero de sus colegas)
Viva y desgarrada palabra,
esta tarde quise hacerte un tributo.
Pero no pude, no, no pude
porque estuve como muerto un buen rato
pensando, como en sueño
y mudo.
La verdad, no sé qué me pasó. Me parece que estaba
como esperando a darme el homenaje
de tragos juntos.
Sí. Y creo que resucitarme de esta tarde
con tu desgarrada y viva palabra
es, de la palabra, lo justo.
VOZ DEL VERSO
Yo me revuelvo en el marasmo azotador de tu cerebro,
justamente en el centro de la idea.
Luego me bajo de la gloria lúcido,
en forma a tu embeleso en ascensor.
Traigo vigor de acero para ti,
mi voz guerrera,
mi sola voz...,
para que te fundas como una espada
y eches la gigantesca flor por la empuñadura del labio.
Traigo vigor de acero.
Tú me pulsas del pecho y haces temblar al aire,
igual que el viento, echándome fuera,
cantándome.
Yo vivo en ti, pegado
a tus entrañas, acompañándote
en tu gloria actual:
ser de las aguas en el río...,
el cauce más dichoso de tu sangre.
Yo soy tu verso.
Lamo las nubes.
Yo soy tu cumbre... ¡Ande!
Adolfo González
6 comentarios:
Gracias, Viktor, muchas gracias, de verdad, popr tus palabras. Espero que me sirva de algo seguir escribiendo.
Me voy pitando, que se me acaba el tiempo del ciber.
Un abrazo
Gracias, Viktor, muchas gracias, de verdad, popr tus palabras. Espero que me sirva de algo seguir escribiendo.
Me voy pitando, que se me acaba el tiempo del ciber.
Un abrazo
Adolfo, tienes cuerda para rato. Seguiremos leyéndote, seguirás escribiendo, leyendo, compartiendo poesía en los bares, en los ciber, en las tertulias o reuniones de poetas, en los diarios trasiegos, en las noctivagas rondas.
Los asuntos que hierven en las páginas de tu poética son de un caudal imparable.
Un abrazote muy fuerte,
Tu Viktor
adolfo tiene cojida por los huevos a la poesia, y espero que siga asi mucho tiempo,
Dioni:
No se puede ser más gráfico. Adolfo tiene atrapada a la Palabra por su aparato reproductor (en eso además de estar de acuerdo estamos en polisémica observancia). Y es mutuo, porque la Poesía tiene enganchado a Adolfo por las orejas y los ojos.
Dioni, gracias, eres un colega grande (no solo de talla corporal) sino sobre todo porque eres muy generoso y nada ramplón. Sabes posicionarte y le hechas huevos a la vida, a la poesía y a la amistad.
Un abrazo, compa,
Tu Viktor
bravo por adolfo
estoy algo jodido y no vi tu blog
un abrazo viktor
el Kebran
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