Llegó una tarde un caballo a mi desolación. Ya su sonoroso trote, después su mirada, después su salto conmigo en su lomo... algunos versos de Mestre, rebeldes y libérrimos, traen con su música el recuerdo de aquella imposible hora en que a la grupa del alazán pude saltar los muros de la cárcel. ¡Qué hermoso es el mundo y que terrible mentira el discurso de las alambradas!.
Gracias, Juan Carlos, libertador de huérfanos y corceles.
El horizonte es un caballo rojo que relincha en los labios de la multitud enterrada.
Inicio del poema "Nocturno de Silos"
----
Esta es mi edad, generación levantada sobre un lecho de sombras, como la desventura en el espejo de los sextantes y el presentimiento que advierte la presencia de un ángel. Ríos del corazón, jóvenes vinculados por un imán al prodigio de la materia celeste. Islas donde los célibes entonan el canon de la lentitud del lenguaje, la áspera sabiduria de juntar los propósitos con la utopía del hombre, el cuarzo y las abreviaturas góticas, las infinitas orillas del deseo y la muerte.
Fragmento de "Las puertas de la curiosidad"
--
---
Mi alma es esa casa de madera que arrasa el vendaval
Inicio del poema "El arca de los dones"
----
----
La poesía ha caído en desgracia y las salamadras azules del mediodía entran en la ruina de sus vasijas ceremoniales con los ojos desorbitados por el sol de la muerte.
Toda necesidad ha desaparecido, la olorosa cebada en las alacenas vacías, el arca con las semillas de sésamo.
Todo lo que ha arrasado el viento sobre la tierra húmeda había sido hermoso en la voz de mi padre, la suave hierba del dialecto y la agonía de los petirrojos en el avellano.
(.../...)
Fragmento inicial de "La poesía ha caído en desgracia"
---
Selección de palabras de lo sustantivo suficiente del Poeta Juan Carlos Mestre. He obviado poemas o palabras de "La tumba de Keats" que es un poemario fundamental de los que se han escrito desde la transición española a hoy, porque como Obra mayor quisiera abordarla más detenidamente en otras entradas de éste blog.
Diario de León. Biblioteca leonesa de escritores.
Juan Carlos Mestre.
Las estrellas para quien las trabaja
(Antología Poética)
2 comentarios:
Es sorprendente cómo, en este tiempo de silencios y poesías adensadas, el barroquismo y el torrente léxico de Mestre mantenga tanta lucidez, tanta carga emocional y nos obligue a despertar ante nuestro propio lenguaje y sus posibilidades.
Espero con expectación la futura entrada de La Tumba de Keats que, estoy seguro, será tan rigurosa y lúcida como a las que nos tienes acostumbrados.
un abrazo.
LAS ESTRELLAS PARA QUIEN LAS TRABAJA.
¿Se puede ser más poético?
Publicar un comentario