lunes, 2 de noviembre de 2009

ANTONIN ARTAUD: PARA ACABAR CON EL JUICIO DE DIOS


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LA BÚSQUEDA DE LA FECALIDAD

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Allí donde huele a mierda
huele a ser.
El hombre hubiese podido muy bien no cagar,
no abrir el bolsillo anal,
peroelogió cagar
como hubiera elegido vivir
en vez de aceptar vivir muerto.

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Para no hacer caca,
tendría que haber consentido
no ser,
sin embargo, no se decidió a perder
--------------------------- el ser,
es decir, a morir viviendo.

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Hay en la existencia
algo particularmente tentador
-------------------------- para el hombre
y ese algo es

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LA CACA
................................ (aquí, rugido)

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Para existir basta con dejarse ser,
pero para vivir
hay que ser alguien,
hay que tener un HUESO,
hay que atreverse a mostrar el hueso
y a olvidar el alimento.
El hombre prefirió más la carne
que la tierra de los huesos.
Como no había más que tierra y bosque
-------------------------------- de huesos
tuvo que ganarse su alimento,
no había mierda
solo hierro y fuego,
y el hombre tuvo miedo a perder la mierda
o más bien deseo la mierda
y para eso sacrificó la sangre.
Para tener mierda,
es decir carne,
dónde solo había sangres
y chatarras de osamentas,
donde no tenía nada que ganar
y si algo que perder: la vida.

............ o reche modo
............ to edire
............ de za
............ tau dari
............ do padera coco

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Entonces el hombre se replegó y huyó.

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Lo devoraron los gusanos.

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No fue una violación,
se prestó a la obscena comida.
La encontró sabor,
aprendió por si mismo
a hacerse el tonto
y a comer carroña
delicadamente.

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Pero ¿de dónde procede esa despreciable abyyección?

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De qué mundo no está ordenado todavía,
o de que el hombre sólo tiene una pequeña idea
--------------------------------------- del mundo
y quiere conservarla eternamente.

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Proviene de que, un buen día,
el hombre
detuvo
------------------ la idea del mundo,

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Se le ofrecían dos caminos:
el infinito exterior,
el infinito interior.
Y eligió el ínfimo interior,
de dónde sólo hay que estrujar
el bazo
la lengua
el ano
o el glande.

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Y dios, dios mismo acelero el
.............................------------- movimiento.

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Dios ¿es un ser?
Si lo es, es la mierda.
Si no lo es
no existe.
O bien sólo existe
como el vacío que avanza con todas
----------------------------- sus formas
y cuya representación más perfecta
es la marcha de un grupo incalculable
------------------------------ de ladillas.

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"¿Está usted loco, Señor Artaud, y la misa?"

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Reniego del bautismo y de la misa.
No hay acto humano
que, en plano erótico interno,
sea más pernicioso que el descenso
del supuesto Jesucristo
a los altares.
No me creerán
y desde aquí veo cómo el público se encoge de hombros
pero el llamado Cristo es quien
frente a la ladilla-dios
aceptó vivir sin cuerpo
mientras un ejército de hombres,
descendiendo de la cruz
a la que dios creía haberlos clavado desde hacía mucho,
se rebeló
y ahora esos hombres
armados con hierro,
sangre
fuego y osamentas
avanzan, denostando al Invisible
para terminar de una vez con el JUICIO DE DIOS.

3 comentarios:

PÁJARO DE CHINA dijo...

Artaud es infalible, atemporal e inoxidable.

Si Dios nos hizo a su imagen y semejanza, ¿por qué yo nunca lo vi cagar? (en sentido físico, porque en sentido simbólico sí que nos caga y en forma).

Besets, muchos.

Arturo Borra dijo...

Además de festejar el buen humor de Artaud y de Mariel, también hay aquí mucha puesta en crisis de la solemnidad de la Poesía. De las Creencias, del ser humano mitificado.
Un poema escatológico así, me parece, es una carcajada filosófica. Un reírse a los grandes temas, al lenguaje poético institucionalizado, a esa delicadeza que prohibe el uso de ciertos vocablos: caca, mierda y tantos otros.
No voy a decir que me "gusta" el poema. Pero está claro que el valor de un poema no reside en nuestros juicios de gusto. Está en su capacidad de intervenir, de punzar, y este poema punza o... para decirlo en su otro modo: nos caga, lanzando una carcajada burlona para todos aquellos que se toman demasiado en serio a sí mismos.

Mucho más habría que decir... porque lo que esta escatología cuestiona es precisamente la altura en la que a veces se autositúa el ser humano.

Un abrazo fuerte,
Arturo

Víktor Gómez Valentinos dijo...

Queridos amigos:

Es Antonin Artaud, todavía, incisivo y ardiente combatiente, el que se niega la debilidad de lo superfluo, el que horada los preceptos y proposiciones de la hegemonía ideológica, le cava una tumba e inhospita deja su palabra empalando falacias y desmanes.

De la mierda a la simple existencia, de la existencia a la simple mierda... solo Antonin podía osar a sobre las hermosas huertas del poder abonar con naturalidad desde su verbo insurrecto, contra toda hipócrita y desleal estructura vaticana, militar-económica y canonico-cultural.

Un beset, pájaro de china
Un abrazote, Arturo